Los láseres médicos empleados en Depilación Láser actúan emitiendo un haz de luz que transmite alta energía que se concentra en el tallo o base del pelo, en el cromóforo y se transmite al folículo piloso, en forma de calor. La melanina que contiene el folículo produce una desnaturalización proteica por hipertermia que destruye la raíz del pelo, consiguiendo la disfunción del folículo y por tanto hace que no vuelva a generar vello. El calentamiento de la zona de la piel impactada se alivia mediante sistemas de refrigeración, siendo el más eficiente el criógeno, que hace un efecto anestésico.
Hoy en día es la depilación más demandada y con mejores resultados, ofrecemos información gratuita.
las sesiones se realizarán siempre por personal médico.
El láser diodo para depilación es aconsejable cuando el pelo es grueso y oscuro y la piel es fototipo alto (a partir de IV). Esto no quiere decir que no se pueda tratar a fototipos más bajos, se puede y además los resultados son excelentes. Pero el valor diferencial del láser de diodo es que aporta mayor seguridad para las pieles más oscuras. Y su condicionante es que el pelo sea de calibre grueso o mediano y bastante oscuro.
La luz pulsada intensa (de uso médico, clasificada como equipo IIIB o IVA) es una herramienta muy versátil, se trata de un sistema que emite una luz intensa no coherente (no láser) que puede filtrarse mediante el empleo de un cut-off o filtro de corte que selecciona la porción de los fotones que se van a aplicar al tratamiento en función del tipo de pelo y piel.
Permite ajustar la luz para tratar un pelo de calibre fino sobre una piel de fototipo alto, eliminar un pelo más profundo y otros muchos planteamientos.
Además, los pulsos de tipo rectangular que aportan la energía de forma más homogénea a lo largo del ancho de pulso han supuesto un incremento de seguridad para la integridad de la piel.
Luz Pulsada Intensa. Por ello, es frecuente que sea la primera elección en depilación facial